Yoga para mayores
La práctica de yoga en la tercera edad puede suponerle a las personas mayores muchos
beneficios. Esta disciplina no requiere de movimientos bruscos, pero
aporta fuerza para los músculos, oxigenación para los tejidos y mucho
más.
Una de las claves del yoga es la respiración
profunda y certera. Esto ayuda a que los tejidos se oxigenen de una manera
mucho más efectiva, colaborando así con un mejor bienestar general del
cuerpo.
El estiramiento suave del yoga y todo el trabajo muscular ayudan mucho no sólo a
estar en un mejor estado de elasticidad y tonicidad muscular, sino también a
toda la zona vertebral y la postura en general.
El yoga es una actividad que demanda concentración y también que produce una relajación muy intensa, a la vez que se trabaja con todo el cuerpo y la mente en armonía.
Es por esto que puede resultar de maravillas para aquellas personas de la
tercera edad.
Mantener la actividad física de manera constante. Así se evita caer en el síndrome de inmovilidad, que puede deberse a un accidente, a partir del cual se deja de realizar actividad física, o a una disminución paulatina de ejercicios habituales como salir a pasear.
Los ejercicios de Yoga para mayores mejoran el equilibrio.
Varias partes del cuerpo actúan a la vez, por lo que se pueden ver como ejercicios de coordinación.
Los beneficios anteriores sirven para reducir significativamente el número de caídas y
tropiezos.
La desaparición de los efectos secundarios de estas caídas también tienen que tenerse en cuenta. Mejora el tono muscular.
La actividad produce no solo el mantenimiento en buenas condiciones de la forma física, sino que ayuda a encontrarse más fuerte y sano.
El Yoga ayuda a prevenir la osteoporosis, tal como señalan ciertos estudios científicos.
Aumenta la capacidad pulmonar, esto aumenta la calidad de vida al no tener que depender de bombonas de oxígeno u otros elementos similares.
Los ejercicios de Yoga para mayores ayudan al proceso de circulación de la
sangre, mejorando los niveles de oxígeno y transportando los nutrientes por todo
el cuerpo.
Estimula el sistema inmunológico. Es ideal para activar la mente. Los científicos calculan que se pierden (sin tener enfermedades, de manera natural) unas 10.000 neuronas cada día, pero el Yoga para mayores hace que la pérdida no se note pues crea más conexiones entre ellas de manera que se incrementa el flujo de información entre neuronas.
Tiene un efecto relajante.
Al realizarse ejercicio se tiene una sensación de satisfacción opuesta al sentimiento generado por la pereza.
Aumenta la concentración. Podrás mantener tu mente fija en un tema durante más tiempo, llegando a comprender la esencia del objeto en el que te concentras.
Ayuda a controlar las emociones. Esto redunda en la tensión corporal, que se ve reducida, como vimos anteriormente.
Todas y estas son algunas ventajas de practicar Yoga por lo que la salud y la edad esta relacionado con el estado de nuestro cuerpo físico y mental.