Beneficios espirituales.

Con la práctica de Yoga y mediante la observación consciente, vamos aceptando y transformamos todas nuestras experiencias de vida para convertirlas en experiencias de Amor propio, desarrollando la fuerza de voluntad, la autoestima, el auto-conocimiento, la paciencia la tolerancia, la compasión el perdón, el respeto, la alegría, la confianza,  todas las características del amor para conectar con las cualidades de nuestro Espíritu lo que nos hace mejorar las relaciones con los demás y con nosotros mismos.

Somos una unidad; cuerpo, mente y espíritu, abrazamos el momento acercándonos a nosotros mismos, con todo lo que somos, sin juicios y con mucho Amor. 

Observando nuestra energía y nuestro estado interior,

Yoga es el camino del guerrero espiritual, el guerrero del corazón donde aprendemos a ser lo suficiente mente valientes para ir a nuestro interior, observar aceptar y transformar.